Es bastante evidente la importancia que tiene en estos tiempos la transformación digital para las entidades pero, muchas veces el camino a seguir no es tan claro. Si hablamos de las entidades del Tercer Sector y la Economía Social y Solidaria quizás las necesidades sean aún mayores.
En este contexto, y para facilitaros el proceso, os explicaremos las distintas fases o etapas para realizar una transformación digital lo más efectiva posible:
- Conocer el grado de madurez tecnológica
Lo primero de todo será medir las capacidades, puntos fuertes y debilidades de la entidad. Según “Cómo transformar tu fundación y no morir en el intento” podemos ubicarnos o identificarnos con uno de estos cuatro niveles:
– Tradicional. Son aquellas entidades que se plantean la transformación digital. Utilizan algunos canales digitales, pero sin conseguir explotar del todo sus beneficios y se caracterizan por su inmadurez en la cultura digital.
– Medio. Dentro de este nivel podremos encontrar a las organizaciones que tienen iniciativas digitales puntuales definidas o en proceso de implementación, pero carecen de un plan estratégico que les permita alcanzar objetivos y extender la cultura digital.
– Avanzado. Siguen los objetivos definidos dentro del plan. Además, el equipo cuenta con conocimientos avanzados en temas digitales.
– Digital. Son las que han conseguido adoptar una cultura digital, dominando la transformación digital y haciéndola parte de su día a día.
2. Definir qué se quiere conseguir
Todas las entidades deberán de plantearse ciertos objetivos a conseguir en un futuro. Tras esta gran pregunta de ‘’¿qué queremos conseguir con el proceso de transformación digital?’’, obtendremos varios objetivos:
- Comunicación y captación. Se trata del marketing y el fundraising, es decir, cómo la digitalización ofrece nuevas vías para captar recursos o mejorar las que tenemos. Durante el confinamiento y para frenar el impacto del coronavirus este fundraising digital ha sido determinante a la hora de captar fondos para luchar contra la enfermedad.
- Las nuevas tecnologías han creado nuevos canales y espacios para llevar a cabo las campañas de influencia. Ya hay muchas organizaciones que se han unido a TikTok para llegar a su público más joven y así concienciarlos.
- Productos y servicios. Son las herramientas digitales creadas con el objetivo de que las entidades sociales ofrecen un mejor servicio a los colectivos más vulnerables. Es en esta área en la que la aplicación de mejoras tecnológicas tiene un impacto directo en la calidad de la misión de la organización.
- Gestión interna. Hace referencia al uso de la tecnología para mejorar los procesos internos de la organización y, además, reducir costes (herramientas de comunicación interna, herramientas de gestión de proyectos, etc.)
3. Plantear la estrategia digital
La última y más importante de las fases, la visión debe trasladarse a una estrategia digital que detalle las prioridades y los recursos que vamos a asignar para definir un plan.
Es muy importante tener un plan monitorizado para que así, sea más sencillo evaluar los resultados.
Este proceso que os presentamos ha de hacerse de la forma más transversal posible, con la implicación no sólo de la gerencia u órganos de gobierno de vuestras entidades, sino también del resto de personal y equipos de trabajo.
Y es un proceso escalable y propio de cada entidad. Identificar qué necesitamos, para qué lo queremos y cuáles son las mejores herramientas, es un camino propio de cada entidad que ha de realizarse poco a poco pero de forma decidida.
Desde CAIS ofrecemos servicios de consultoría, acompañamiento, formación y herramientas tecnológicas para que el proceso de adaptación tecnológica de tu entidad social no sea un lastre, sino un camino de aprendizaje y mejora de los procesos e impactos de vuestra organización.